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La vitamina D es importante para tener huesos, dientes y músculos sanos. La falta de ella puede provocar una enfermedad de deformidad ósea llamada raquitismo en los niños y una condición similar a la debilidad de los huesos llamada osteomalacia en los adultos. También hay sugerencias de que la vitamina D estimula el sistema inmunológico y ayuda a combatir las infecciones.
Varios estudios publicados recientemente dicen que la vitamina D puede reducir la gravedad de COVID-19. Mejorar los niveles de vitamina D en la población general, y especialmente en los pacientes hospitalizados con COVID-19, podría ayudar a reducir la gravedad de la enfermedad COVID-19 y la muerte asociada. Las personas que murieron por COVID-19 tenían niveles más bajos de vitamina D que las que sobrevivieron.
Los pacientes hospitalizados con COVID-19 que tenían deficiencia de vitamina D desarrollaron síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA). Estudios anteriores también han demostrado que la deficiencia de vitamina D está asociada con riesgos de infección del tracto respiratorio en general.
Por ejemplo, se sabe que ciertos grupos demográficos tienen un mayor riesgo de deficiencia de vitamina D, como las personas de raza negra, los ancianos, los residentes de hogares de ancianos y las personas con obesidad o diabetes, tienen un mayor riesgo de infección y mortalidad debido a COVID-19.
Debido a que la deficiencia de vitamina D es tan común en todo el mundo, especialmente en los meses de invierno, se recomienda que todos tomen suplementos de vitamina D para reducir el riesgo de infectarse y tener complicaciones por COVID-19.
Los suplementos de vitamina D están ampliamente disponibles, pueden contener solo vitamina D o son parte de un complejo multivitamínico. El ingrediente que figura en la etiqueta de la mayoría de los suplementos de vitamina D es D3. Si tienes una dieta bien balanceada, puedes ayudar a asegurar el funcionamiento normal del sistema inmunológico, pero es difícil obtener suficiente vitamina D solo de los alimentos.
Aunque los suplementos de vitamina D son muy seguros, la administración diaria de una cantidad mayor a la recomendada puede ser peligrosa a largo plazo. En ocasiones, el médico puede recomendar dosis más altas en pacientes con deficiencia alta de vitamina D.
La exposición al sol no causa una sobredosis de vitamina D, pero el sol quema fuertemente la piel, por lo que debes exponerte al sol de manera segura. Protege tu piel con protector solar para prevenir quemaduras en la piel.
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