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Debido a que estos dos tipos de enfermedades tienen síntomas similares, puede ser difícil diferenciarlos según los síntomas. El resfriado y la gripe son muy comunes en los meses de invierno.
El resfriado es una enfermedad respiratoria leve que la gripe y no ocasiona problemas de salud graves como neumonía, infecciones bacterianas u hospitalización. En promedio, los adultos contraen dos o tres resfriados por año y los niños más.
En general, la gripe es más grave que el resfriado y los síntomas son más fuertes. La gripe también puede provocar problemas de salud graves, como neumonía y hospitalización. La gripe es menos común, pero aún afecta a las personas en todas las estaciones.
CAUSAS DEL RESFRIADO Y DE LA GRIPE
El resfriado y la gripe son enfermedades respiratorias, pero son causadas por diferentes virus.
Más de 200 virus diferentes, incluidos los rinovirus y algunos coronavirus (no el responsable del COVID-19), pueden causar un resfriado.
Los virus de la gripe causan la gripe y hay tres tipos principales: A, B y C. Los tipos más comunes durante la temporada de gripe son A y B.
SÍNTOMAS DEL RESFRIADO
Aunque puedes sentirte enfermo cuando tienes un resfriado, los síntomas generalmente son leves en comparación con la gripe. Estos son algunos de los síntomas del resfriado común:
- Fiebre leve o nula
- Los niños tienen más probabilidades de tener fiebre
- Moqueo o congestión nasal
- Dolor de garganta
- Tos (leve)
- Fatiga (a veces)
- Estornudo
- Ojos mojados
- Dolor de cabeza (raro)
- Dolor muscular
El resfriado aparece gradualmente en unos pocos días y suele ser más leve que la gripe. Los síntomas duran entre siete y 10 días, aunque pueden durar hasta dos semanas.
Aunque el resfriado puede ocurrir en cualquier época del año, es más común en los meses de invierno. Esto se debe a que la mayoría de los virus que causan el resfriado se desarrollan cuando la humedad es baja.
El resfriado se transmite a través de secreciones que se eliminan cuando una persona enferma estornuda o tose. Puedes enfermarte si tocas una superficie que ha sido tocada recientemente por una persona enferma y luego tocas tu nariz, boca u ojos. El resfriado es contagioso durante los primeros dos a cuatro días después de la exposición al virus.
SÍNTOMAS DE LA GRIPE
La gripe es una infección respiratoria común causada por un virus que afecta la nariz, la garganta y los pulmones. Estos son algunos síntomas comunes de la gripe:
- Fiebre moderada a intensa
- Moqueo o congestión nasal (a veces)
- Dolor de garganta (a veces)
- Tos (generalmente seca)
- Fatiga severa
- Escalofríos
- Dolor de cabeza
- Dolor muscular severo
- Náuseas y vómitos, así como diarrea (más común en niños)
Los síntomas de la gripe aparecen rápidamente y pueden ser graves. Suele durar de una a dos semanas.
A diferencia del resfriado, que ocurre en cualquier época del año, la gripe generalmente es estacional.
Durante la temporada de gripe, puedes contraer la gripe al entrar en contacto con las secreciones transmitidas por una persona enferma. La gripe es contagiosa desde un día antes de enfermarte y hasta cinco – siete días después de la aparición de los síntomas.
RIESGOS DE LA GRIPE
Las personas que corren el riesgo de desarrollar complicaciones graves son:
- Las personas mayores de 65 años
- Las mujeres embarazadas
- Los niños menores de 2 años
- Los niños menores de 18 años que toman aspirina
- Las personas con sistemas inmunitarios debilitados debido al VIH, tratamiento con esteroides o quimioterapia
- Las personas que padecen obesidad
- Las personas con enfermedades pulmonares o cardíacas crónicas
- Las personas con trastornos metabólicos, como diabetes, anemia o enfermedad renal
En algunos casos, se requiere atención médica de emergencia. En los adultos, los signos de una emergencia incluyen:
- Problemas respiratorios
- Dolor de pecho severo
- Dolor de cabeza intenso
- Dolor de garganta severo
- Tos que produce moco verde
- Mareos
- Confusión
- Fiebre alta y persistente
- Vómitos persistentes
En los niños, los signos de una emergencia incluyen:
- Dificultad para respirar o respiración rápida
- Color de piel azulado
- Negarse a comer o beber
- Fatiga extrema
- Letargo e incapacidad para interactuar normalmente
- Irritabilidad
- Síntomas que mejoran y luego empeoran repentinamente
- Fiebre acompañada de una erupción
TRATAMIENTO
Cómo tratar el resfriado
Debido a que el resfriado es una infección viral, los antibióticos no son efectivos para tratarlo. Los antihistamínicos, descongestionantes y acetaminofén pueden aliviar la congestión, el dolor y otros síntomas del resfriado. Se recomienda consumir líquidos para evitar la deshidratación. Algunas personas toman remedios naturales, como zinc, vitamina C o equinácea, para prevenir o aliviar los síntomas del resfriado. La vitamina C no parece prevenir los resfriados, pero si la consumes constantemente, puedes aliviar los síntomas.
Cómo tratar la gripe
En la mayoría de los casos, la ingesta de líquidos y el reposo son las mejores formas de tratar la gripe. Se recomienda una ingesta elevada de líquidos para evitar la deshidratación. Los descongestionantes y analgésicos, como el ibuprofeno y el acetaminofeno, pueden controlar sus síntomas y ayudarte a sentirte mejor. Tu médico puede recetarte medicamentos antivirales para tratar la gripe. Estos medicamentos pueden acortar la duración de la gripe y prevenir complicaciones como la neumonía. Sin embargo, es posible que no sean efectivos si no se toman dentro de las 48 horas posteriores a la enfermedad.
A diferencia del resfriado, la mejor forma de prevenir la gripe es la vacuna contra la gripe. Si has sido vacunado contra la gripe y aún tienes gripe, tus síntomas serán más fáciles que si no te hubieras vacunado.
Para obtener más información sobre la vacuna contra la gripe, puedes leer nuestros artículos sobre este tema: La vacuna contra la gripe y Los mitos sobre la vacuna contra la gripe.
PREVENCIÓN DEL RESFRIADO Y DE LA GRIPE
Hay pasos que puedes tomar para mantenerte alejado de los virus que causan enfermedades respiratorias y reducir el riesgo de propagarlos:
- Mantente alejado de las personas enfermas
- Cúbrete la boca y la nariz cuando estornudes o tosas
- Lávate las manos con frecuencia
- Evita tocar tus ojos, nariz o boca
- Desinfecta las superficies con regularidad
- Duerme lo suficiente, evita un estilo de vida sedentario y reduce el estrés
- Consume muchos líquidos y come alimentos nutritivos.
Debido a la pandemia de COVID-19, reducir la propagación de enfermedades respiratorias, incluida la gripe, durante la temporada de gripe es más importante que nunca.
Si deseas saber sobre la vacuna contra la gripe, consulta nuestro artículo sobre este tema: Todo sobre la vacuna contra la gripe.
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